Aparece en Alemania un Porsche 911 GT3 RS 4.0 desguazado. El vehículo, que fue robado el pasado 30 de enero, mantiene parte de su carrocería, pero tanto las ruedas como su motor han sido sustraídos.
Un ciudadano en Alemania ha debido padecer el mismo malestar que sintió en su día la ‘playmate’ Jessica Barton cuando halló despedazado su mil veces retocado Toyota Supra. En este caso, el expolio lo ha sufrido un Porsche 911 GT3 RS 4.0, desguazado y encontrado entre la nieve.
El exclusivo vehículo, solo se fabricaron una remesa de 600 unidades, es una potente cuadriga de carreras moderna tirada por 500 caballos de potencia. Con un precio superior a los 200.000 euros, y a la vista de la imagen de cómo ha quedado tras la rapiña delincuente, la reparación se antoja incluso más cara que la compra de uno nuevo.
Sin embargo, la exclusividad del Porsche 911 GT3 RS 4.0 hace imposible que este propietario alemán vuelva a disfrutar de él. Robado el pasado 30 de enero, prácticamente todos los elementos del vehículo han sido sustraídos. Los ladrones han tenido la 'deferencia' de dejarle el chasis y el volante, lo mismo por si quiere quedárselo como recuerdo, pero el desguace ha sido en general de lo más completo. Ruedas, suspensiones, motor, asientos, aletas, faldones, puerta e incluso el deposito del combustible han sucumbido a la codicia de los rateros.
La estampa del Porsche 911 GT3 RS 4.0 desguazado con la que se encontró su propietario debió ser apabullante. De ser el conductor de una flamante y poderosa máquina a convertirse en el dueño de una serie de hierros, que ya yace bajo el inclemente frío alemán.
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