Y Porsche no ha defraudado. Porque cuando pones a un montón de ingenieros alemanes amantes de la sobre-ingeniería al mando, tienes resultados como el de este nuevo 911. Espectaculares.
El techo, que es de lona, como en un 911 Cabrio, se repliega también de una manera parecida al modelo descapotable. Para ello, toda la cúpula posterior, incluyendo la luneta panorámica trasera, se elevan y apartan de la trayectoria.
El resultado en su conjunto es un mixto perfecto entre el tradicional 911 Targa y la modernidad del actual 991. Estéticamente, el arco en aluminio pulido y la luneta panorámica son suficientemente distintos al resto de la gama 911 como para dotar al coche de su propio perfil lateral distintivo.
La trasera, a pesar de contar con todo el sistema de plegado, apenas cambia respecto a un 991 "normal". Sólo se ofrecerá con variantes de tracción integral, así que veremos 911 Targa 4, y 911 Targa 4S, pero por el momento desconocemos prestaciones, consumos y precios, aspectos que te concretaremos a lo largo de las próximas horas y días.
Ahora toca reflexionar "parece hasta demasiado caro todo este sistema para plegar un pedazo de techo tan pequeño". Y no le falta razón. Pero, cuando un consumidor se gasta más de 100.000€ en un coche, parece que quiere todo automatizado, y haber puesto el techo manual habría sido una afrenta al cliente "tipo", ¿o no? ¿O es que la obsesión por sobre-complicar las cosas con ingeniería de por medio está en el ADN Porsche? Que se lo digan a Hitler cuando pidió su Panzer VI y Ferdinand Porsche le apareció con aquel genial tanque híbrido futurista...
Sea como sea, sobrecomplicado e innecesariamente caro, a mi me gusta. Tal vez sea que el ingeniero que llevo dentro no me deja ver más allá. Ahora te toca a ti opinar, después de ver este genial vídeo del sistema en funcionamiento.
Ahora unas imágenes del nuevo Targa en el Salón de Detroit 2014